Simone Biles es una gimnasta artística estadounidense, ganadora de 41 medallas entre Juegos Olímpicos y Campeonatos Mundiales. Pero no es sólo relevante por sus logros en la gimnasia, sino también por su influencia en la salud mental. Un estudio de la empresa Suzy, revela que la deportista motivó al 63% de las mujeres que conocen su historia a priorizar el bienestar emocional.
El informe titulado “Empowering Women’s Wellness: Addressing Stressors and Creating Supportive Brand Partnerships” explora el bienestar de las mujeres en el que influyen diversos factores. Según el estudio, los más estresantes son la incertidumbre financiera, la salud mental y las presiones sociales.
La retirada en Tokio
A pesar de los avances, la salud mental sigue siendo un tema tabú, especialmente entre las mujeres, muchas de las cuales sienten culpa por dedicar tiempo a sí mismas. Simone Biles se convirtió en ejemplo de esto cuando decidió retirarse de varias finales en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 debido a un bloqueo mental conocido como "twisties". Se trata de una pérdida repentina y aterradora de la conciencia espacial que los gimnastas experimentan mientras están girando en el aire.
Su carrera comenzó en 2013 en el Campeonato de Amberes, donde ganó dos medallas de oro, incluyendo el codiciado título del concurso completo. Su innovador movimiento en el ejercicio de suelo, conocido como el “Biles”, un doble trazado con medio giro, la colocó como la favorita indiscutida.
Pasaba de una medalla a otra, de un campeonato a otro hasta que, en Tokio, se paró el mundo para la olímpica. "Ya no confío tanto en mí misma, tengo que concentrarme en mi salud mental", confesó. Esa decisión la colocó en el centro del debate mediático, muchos se preguntaban si valía la pena enfrentar públicamente esta crisis. Y en medio del ruido, un estudio demostró que sí con cifras que lo confirman.
El impacto en la salud mental
Entre quienes conocían la situación de Biles, el 69% informó que ella había tenido un impacto positivo en su visión de su propia salud mental. El 63% de las mujeres afirmó que se sentían más inspiradas a priorizar este aspecto y el 61% aseguró ser ahora más transparente respecto de sus luchas.
En cuanto a las causas de estrés, el estudio señala que la principal preocupación de las mujeres sigue siendo la financiera (47%), seguida por la salud física y el sueño. Además, el informe destaca cómo la pandemia de la covid-19, especialmente para mujeres embarazadas y cuidadoras, dejó secuelas en la salud mental de muchas de las encuestadas.